La transformación digital llegó antes y con un ritmo más acelerado de lo que habíamos pensando; sin embargo, no es el único tema que debemos mirar para adaptarnos a lo que viene.¿Cuánto se ha hablado del futuro del trabajo? Pues bien, hoy estamos viviendo una transformación nunca antes vista, con cambios organizacionales no solo tecnológicos, sino también culturales. Tanto las empresas como los talentos se preparan para entrar de lleno en la era de la agilidad, el dinamismo y los equipos orientados a resultados.
Es interesante saber que la tecnología es un componente más en esta transformación. Al mismo tiempo que se incluyen nuevas herramientas y aprendemos a aplicarlas, el futuro del trabajo nos demanda el desarrollo de habilidades blandas y gestión de equipos.
En este sentido, es clave que las empresas empiecen a generar una cultura de inclusión, porque mejora la salud mental y el bienestar emocional de los colaboradores, dando lugar a organizaciones centradas en las personas.
Siguiendo esta línea, es preciso saber que la diversidad es el gran valor de las firmas del futuro, y con esto no solo nos referimos al tema de género, sino a todo tipo de diversidad, creando equipos más empáticos y con más apertura hacia los cambios. Tener en un mismo lugar de trabajo a personas con perspectivas diferentes, nos impulsa a desarrollar proyectos más creativos.
NUEVOS MODELOS
Con el crecimiento del home office, surgieron también modelos de organización que hasta la fecha parecían impensados. En este sentido, los talentos IT ya venían algo acostumbrados a modelos híbridos (trabajando más desde sus casas u otra ubicación, que yendo a la oficina). Es por eso que hoy, las empresas toman este modelo para saber cómo adaptarse y seguir estimulando la productividad de sus equipos.
Esta situación también nos invita a tener la apertura de trabajar con equipos ubicados en diversas ciudades, países y hasta continentes, implicando el aprender a gestionar con mayor flexibilidad a fin de integrar la diversidad cultural y la construcción de confianza en los vínculos a distancia.
Por último, el futuro del trabajo nos invita a mantener el respeto por la vida personal y familiar de cada empleado. Esto será esencial, porque permitirá que cada integrante del equipo se sienta cómodo con la cultura empresarial y, sobre todo, se genere un lazo con la empresa y sus compañeros.
